ESTOY GRITANDO, ME CONOCÍ DE ESA MANERA
ME CONOCÍ DE ESA MANERA
MARÍA SOTOMAYOR
Desde que todo se observa, los dedos son más largos colocando todo en su sitio, preguntándose: a qué viento se le debe tanto miedo.
MARÍA SOTOMAYOR
Desde que todo se observa, los dedos son más largos colocando todo en su sitio, preguntándose: a qué viento se le debe tanto miedo.