HA LLEGADO ISAIAS
KRASZNAHORKAI, LASZLO
"György Korin detuvo el coche ante la entrada del bar NON STOP de la estación de autobuses, paró como pudo el motor, se apeó y empujó la puerta sin titubear, se dirigió tambaleándose a un hombre solitario, la única persona que se hallaba ante la barra, y, en vez de derrumbarse en el acto, tal y como habría correspondido a su estado de embriaguez, le dijo : "Querido ángel, llevo mucho tiempo buscándote".