LA CALLE DEL FANTASMA
GONZÁLEZ, ENRIC
Hay una calle igual en cada ciudad del mundo. A lo mejor no lo sabes, o no la has visto, pero está allí. En esa calle vive el fantasma. No da miedo, no es de esa clase de fantasmas; él puede hacerte la vida mucho más fácil: pídele lo que quieras y él hará realidad tu deseo. Pero vigila lo que deseas y lo que el fantasma te pide a cambio porque hay cosas que no tienen precio. Eso mismo están a punto de averiguar el joven protagonista de esta historia y el Mortadela, dos amigos que son uña y carne, en una aventura que corre, asusta y ruge. El ilustrador Riki Blanco ejerce de titiritero y el periodista Enric González de ventrílocuo, manejando en la sombra un cuento que se esconde: no olvidéis acercaros mucho, mucho a sus páginas, quizás así lo veréis todo más claro o el fantasma os verá mejor a vosotros.
Hay una calle igual en cada ciudad del mundo. En esa calle vive el fantasma. Pídele lo que quieras y él hará realidad tu deseo. Pero vigila lo que deseas y lo que el fantasma te pide a cambio porque hay cosas que no tienen precio.
El fantasma (que resulta ser un gato que parece un tigre) le dice al protagonista de la historia que le dará lo que quiera, a cambio solo pide que le entregue su mejor amigo. El protagonista decidirá quedarse con el amigo y acabará preguntándose si no será que mucha gente va a ver el fantasma, porque los adultos tienen muchas cosas pero muy poco amigos.