LA NIÑA DE MUY LEJOS
ANNIKA THOR, MARIA JÖNSSON
Toc toc: una fría tarde de invierno, una niña llama a la puerta de Grisela para pedir cobijo. A Grisela no le gusta la compañía de nadie, prefiere estar sola, pero deja pasar a la pequeña que está en evidente necesidad. Finalmente la niña se quedará pasando la noche en su casa. Por la mañana Griselda pide a la niña que se vaya con la intención de retomar la tranquila rutina de su vida solitaria, pero no será capaz de quedarse allí mientras sabe que la pequeña se encuentra fuera, sola, perdida en la nieve...
Las dos protagonistas de este cuento nos relatan cada una su experiencia de vida anterior a su encuentro, sin hacer ninguna mención a ella. Un relato hecho de silencio y de ausencias: Grisela vive sola, alejada del mundo, encerrada en su rutinaria seguridad. La pequeña llega sola, alejándose de una vida donde ya nadie puede cuidar de ella, buscando una salida a una situación imposible de vivir. Sus vidas se cruzan en el umbral de una casa que es a la vez fortaleza inexpugnable y posible refugio. En un primer momento Grisela pensará en no dejar entrar a la pequeña, pero algo que no sabemos bien qué es (¿su corazón? ¿aún late en ella?) le hace abrir la puerta y dejarla pasar.