MI MADRE ERA DE MARIÚPOL
WODIN,NATASCHA
«Si tú hubieras visto lo que he visto yo », solía decir la madre de Natascha Wodin, una frase cuyo misterioso significado se llevaría a la tumba. Su hija tenía entonces diez años y apenas sabía que pertenecía a una especie de basura humana, una escoria residual de la guerra. ¿Por qué vivían en un campo para «personas desplazadas»? ¿De dónde era su madre? ¿Y qué le había sucedido? Solo décadas después se atreverá a abrir la caja negra de su origen, primero discretamente, luego dejando vislumbrar un panorama cada vez más amplio.