LA CARICATURA SOCIAL Y POLÍTICA
HOGART, GROSZ, BAGARIA
KENNEDY, CHRISTINA
La exposición presenta la obra impresa de tres figuras muy relevantes de la Historia del Arte (Hogarth, Grosz y Bagaría), que se destacaron por dedicar una parte significativa de su producción a la caricatura. Es decir, a retratar con una manifiesta intención crítica la realidad social de su época, subrayando ostensiblemente, en ocasiones con tintes moralizantes y, en otras, con extrema agresividad satírica, tanto los elementos causantes de la injusticia, la vanidad y la desigualdad, como los que se situaron en el origen de la corrupción de los poderosos y la explotación de los humildes.
William Hogarth (Londres 1697-1764), formado dentro de los esquemas estéticos del rococó, evolucionó hacia formulaciones personales, muy alejadas de las pautas europeas, y se ha dado en considerar como el pintor inglés más destacado de su tiempo. Creador del género modern moral subjects, narraciones plásticas de contenido con una intencionalidad moralizante, en las que ironizó sobre la pedantería y la vanidad dominantes en los círculos cortesanos, así como sobre la pereza, el alcoholismo, las distintas formas de crueldad y el sistema político de su país.
Las propuestas de Hogarth influyeron en artistas muy posteriores en el tiempo, como George Grosz (Berlín 1893-1959) cuyo discurso gráfico, articulado a partir de recursos de la ilustración tradicional y, también del cubismo y del futurismo, recogió el crispado ambiente berlinés de la época de entreguerras, para denunciar a los auténticos responsables del caos y la corrupción dominantes en Alemania tras la Primera Guerra Mundial.
Y en esa lucha por retirar la máscara de frivolidad y progreso, con la que se prendía esconder la fabulosa crisis de civilización, así como las miserias de toda clase que realmente dominaron la sociedad europea de los años veinte y treinta del pasado siglo, se debe situar a Luis Bagaría (Barc-elona 1882-La Habana 1940), el caricaturista español más popular de su tiempo que evolucionó del modernismo hacia la vanguardia, practicando un tipo de caricatura de gran agresividad política en cuanto a su contenido, y con una neta influencia cubista en lo formal.
Esta aproximación al trabajo de los tres artistas, además de difundir los orígenes de un género como la caricatura, hoy ya una tradición y una vertiente artística consolidada, muestra tres estilos y maneras de hacer muy distintas que se utilizaron para presentar con cruda realidad, en su escenario y sin disfraces, a los personajes que protagonizaron las comedias y los dramas sociales que, incluso hoy, se desarrollan en una, muchas veces absurda, sociedad.
